Coincidiendo con la fecha límite del estado de alarma en España, la Generalitat ha decidido relajar una de las restricciones más duras impuestas para controlar la diseminación de la Covid-19. Bares y restaurantes tienen vetado el servicio en mesa en los turnos de tarde y noche desde antes de Navidades, pero a partir del domingo 9 de mayo a las 00:00h, podrán servir cenas tanto en interiores como en terrazas con hora marcada de cierre a las 23:00h manteniendo el aforo actual del 100% en exteriores y el 30% en salones con una distancia de seguridad entre mesas de, como mínimo, dos metros.
Cataluña es la comunidad autónoma que se ha mostrado más restrictiva con la restauración y la hostelería durante toda la gestión de la pandemia de coronavirus, ya que impuso de nuevo cierres totales a inicios de otoño, luego permitió una abertura tímida de apenas unas horas al día y, desde el 8 de marzo, el horario de funcionamiento se alargó de 7:30 a 17:00h tanto en días laborales como fines de semana y festivos. Tan solo aquellos locales que sirven comida para llevar pueden operar hasta las 22:00h si el cliente recoge el pedido y hasta las 23:00h por entrega a domicilio.
Los índices epidemiológicos en Cataluña siguen estables aunque aún no se divisa una clara tendencia a la baja. Para el 9 de mayo, el departamento de salud catalán prevé que el 80% de la población mayor de 60 años haya recibido, al menos, la primera dosis de la vacuna. Un ritmo de vacunación que debería aumentar con la reciente llegada de más de medio millón de inoculaciones. Desde COFAR celebramos que los restauradores catalanes puedan ejercer su trabajo sin más limitaciones, que ya han causado muchos problemas para su subsistencia.